martes, 7 de julio de 2009

Que el diablo me perdone


El pavo real es el gran protagonista de las portadas.
Lo de ayer daría para una tesis, incluida la rueda de prensa de una hora que brindó, pero no voy a eso; voy a la portada de La Razón.
¿Era necesario poner una foto de tres anónimas señoritas?
Seguro que son tres personas maravillosas, únicas en su género y un orgullo para la Humanidad, pero, la verdad, parecen tres amiguitas de Berlusconi ofreciendo servicios.

No hay comentarios: